Parábola
del sábado
Autor:
Padre Felipe
Santos Campaña SDB
Cuando
íbamos charlando con el Maestro, una mujer salió corriendo a su encuentro.
-
Maestro, mi hija está muy enferma. Los médicos no pueden venir a
curarla porque es sábado. Tranquila, mujer, yo voy.
-¿
Cómo te atreviste a visitar a un enfermo si está prohibido en sábado?
-Muy
sencillo. Y que se os meta en la cabeza. Lo primero que hay en la vida creada
por Dios es el hombre. No las leyes. Si alguien está necesitado, lo primero
que hay que hacer es socorrerlo.
-¿Y
se deja el cumplimiento de la ley?
-Naturalmente.
La ley suprema está centrada en la
persona.
-¿
Qué te han dicho los fariseos o intérpretes de las leyes?
-
Me han puesto verde. Me han llamado impostor. Quieren más tarde o más
temprano acabar conmigo. Les trastorno sus planes. ¿ Os dais ahora cuenta de
mi novedad?
¿Qué
vale más: la ley o la persona?
ORACIÓN
DEL MAESTRO: Padre, hay momentos
en los que ya no aguanto más. Estos dirigentes y leguleyos someten a la
gente a tal represión que, incluso prefieren que se mueran el sábado antes
que curarlos. Me cuesta aguantarlos.