Parábola del recién nacido

Autor: Padre Felipe Santos Campaña SDB


Maestro, en mi reflexión cristiana de este día, con un grupo de adultos he escogido la imagen de tu apóstol Pedro en su primera carta. Me ha gustado transmitir tu mensaje de salvación y la gente, en general, ha experimentado tu realidad en sus vidas.

- ¿Sabes lo que he hecho?
- Nuestra vida es un proceso de despojarnos de toda maldad, fraude e hipocresía, toda envidia y difamación. Esto es del hombre viejo.
- A continuación les he hablado de que un creyente apetece, como niños recién nacidos, la leche espiritual, no adulterada, para crecer sanos.
- Una persona que ha puesto en ti su confianza y te sigue con la mayor fidelidad que puede, necesariamente tiene que alimentarse de la leche espiritual de tu palabra y de tus sacramentos, Estos nunca están adulterados. No hay que poner etiquetas y fechas de caducidad.
- Pues muy bien: Apeteced cada día más mi alimento no adulterado para crecer sanos en mi reino.


¿ Cómo te alimentas espiritualmente?

ORACIÓN DEL MAESTRO: Padre celestial, mis discípulos están trabajando en serio. Me encanta que prediquen en base a la palabra revelada y no la simplemente humana. La revelada siempre tiene incidencia en los corazones bien dispuestos. La humana puede halagar pero desaparece en seguida como hoja llevada por el viento .Padre, en nuestra familia trinitaria, vivamos la unión con ellos y ellas de tal forma que tengamos una perfecta sintonía. Nos da pena que, estando a su entera disposición, sin embargo, nos tengan- algunos- aparcados.

PRECES 

- Por la juventud: para que se alimente de la palabra de Dios , nunca adulterada, roguemos al Señor
- Añade tus intenciones
Señor, comiendo de ti, te decimos: Padrenuestro